miércoles, 19 de diciembre de 2012

Tablas Góticas

La pintura sobre tabla se impuso por toda Europa en el siglo XV convirtiéndose en la forma pictórica predominante. 
Se realizaron retablos con muchas tablas que se organizan en el banco o predela y calles verticales, separadas por estrechas entrecalles, en la calle central estaba el tema principal del retablo.
Se ejecutaba al temple usando como aglutinante el huevo. Novedad en la última fase del gótico de cambiar ese aglutinante por aceite dando lugar a la pintura al óleo.

En esta iconografía podemos ver en la parte superior a la Virgen postrada a los pies de Cristo con un manto de luto viendo como muere su hijo. Junto a ella se encuentra el apóstol San Pablo. En la parte inferior vemos a Santa Clara sentada con un manto en un tono verde, no azul o blanco como acostumbramos a ver a la Virgen.













En la parte superior vemos a Santa Clara ante el Papa junto con otras hermanas que puede referirse al momento en el que San Francisco escribió la norma de vida para las hermanas y, por medio del Santo, obtuvieron del Papa Inocencio III la confirmación de esta regla en 1215, ese año, Clara aceptó el título de abadesa de San Damián. En la parte inferior vemos a San Francisco de Asís, con el evangelio en una mano y levantando la otra. Y alrededor suyo vemos 3 mitras pertenecientes al Papa.
En la parte superior vemos a Clara en su lecho de muerte acompañada de sus hermanas y del Papa Inocencio IV al que le pidió su bendición apostólica y la abolición de sus pecados. En la parte inferior vemos a Santo Domingo de Guzmán que porta en una mano un crucifijo y en el otro un libro con la figura de un niño.

Retablo Mayor de la Seo



En el Gótico la pintura se caracteriza por ser pintura sobre tabla, generalmente al temple en los retablos. Estos se dividen en paneles alineados en calles verticales y pisos horizontales, con un banco también decorado y todo esto protegido por un guardapolvo.

En el sotabanco pueden apreciarse los escudos del arzobispo y del cabildo catedrático. Las antiguas puertas laterales que daban paso a una sacristía situada en el ábside ahora están ocupadas por dos imagenes hechas en alabastro que representan a San Valero y San Vicente.


En el banco se encuentran cuatro escenas de la vida de santos aragoneses:
-El martirio de San Lorenzo en la parrilla:


-El milagro de la endemoniada ante el relicario de San Valero en la Seo:


-San Valero y San Vicente interrogados por el prefecto Daciano en Valencia:


-La "invención" del cuerpo de San Vicente en las afueras de Valencia.

Entre ellas están los nichos destinados a albergar bustos-relicarios.

En el cuerpo del retablo permanecen en pie 4 pilares de alabastro que estructuran y dividen los retablos en 3 calles, sostenidos por figuras de niños y ángeles que estos a su vez soportan sobre sus cabezas las imagenes de santos y sus atributos identificadores.

Las tres escenas principales, talladas, y que sustituyeron a las de madera destacan por su grandiosidad y gran calidad técnica. Son obras naturalistas con tipos de claro carácter germánico. La mas cuidada es la central que está dedicada a la Epifanía:


Las escenas de los lados están dedicadas a la Transfiguración:


y a la Ascensión, son casi simétricas: